El Centro de Recursos para Menores fue inaugurado el 9 de Febrero de 2006. Enmarcado dentro de un proyecto mucho más amplio, el Programa de Autonomía y Emancipación Personal (PAEP) dependiente del Gobierno de Aragón, nace con vocación de complementar las actuaciones que con menores y jóvenes vinculados al Sistema de Protección de Menores de Aragón se están llevando a cabo en los distintos centros y pisos.



viernes, 24 de junio de 2022

¡A SALTAR!

El primer fin de semana de junio nueve menores y varios educadores de Casa SAIM, uno de los centros residenciales que gestiona la Fundación Federico Ozanam, acudieron al Polígono Plaza para pasar una tarde diferente en Penttum Plaza para celebrar que ya quedaba poquito para terminar el curso escolar ✌🥳.











Empezaron la tarde jugando algunas partidas de Air Hockey, para después disfrutar del espacio multiaventura de las camas elásticas, lanzándose a una piscina de espuma y echando pequeñas peleas en la barra de equilibro




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¡¡Que bien lo pasamos 🙌!! Sin duda, una actividad para repetir 👏.

viernes, 10 de junio de 2022

Un campeón en Casa SAIM

 

EL JUDO: UN DEPORTE QUE SE SIENTE EN EL CORAZÓN

Para mí, el judo es el mejor deporte del mundo”. Así comienza a hablar Anass cuando alguien le pregunta acerca del deporte que practica, y así es como este joven de tan solo dieciséis años ha querido comenzar ésta entrada del blog. Durante los últimos meses, ha realizado varias competiciones tanto de clubs como a nivel individual, quedando tercero, segundo y varias veces en primer puesto, ya que siempre ha conseguido subirse al pódium desde que entrena en Zaragoza junto al Club Deportivo Sensei – Actur. A partir de aquí, es él quien escribe las próximas líneas de lo que para él significa poder practicar “el deporte que se siente en el corazón”.

Me llamo Anass, tengo dieciséis años y llevo la mitad de mi vida conectando la cabeza con el corazón a través del judo. Es un arte marcial que le gusta a mucha gente muy diferente entre ellos y, para practicarlo, se necesita realizar un entrenamiento calmado y estar concentrado. A lo largo de los años, también te das cuenta que necesitas estar fuerte físicamente y tener técnica.

Existen varios colores de cinturón según el nivel que posees. El primero es el cinturón blanco o 6º Kyu, que significa pureza. Todas las personas que nos iniciamos en el judo empezamos con éste color, en mi caso fue con ocho años en Marruecos y todavía no podía competir, ya que éste cinturón no da acceso a ello. A los diez años y medio, conseguí superar el examen para cambiar mi cinturón a amarillo o 5º kyu, que significa descubrimiento, lo que me permitió empezar a competir. Desde entonces, he pasado por varios cinturones hasta conseguir el actual: naranja o 4º kyu (ilusión y amor), verde o 3º kyu (esperanza y fé), azúl o 2º kyu (idealismo), marrón o 1º kyu (camino del conocimiento) y negro o dan (madurez). Dentro de los cinturones negros existen varios grados, aunque yo todavía estoy en el primer dan. A partir del 6º el cinturón se vuelve rojo y blanco, y el 9º y 10º dan pertenecen al cinturón rojo. En las competiciones existen varias categorías, las cuales se adquieren por peso y por los años que tienes.

Para mí es muy importante continuar haciendo el judo, y desde que estoy aquí se me ha dado la oportunidad de poder volver a hacer esto que tanto me gusta. Cada vez que entreno, me siento tranquilo y en paz conmigo, olvidando así los problemas que puedo tener. Además, cada vez que compito me gusta intentar ganar, porque quiero seguir perfeccionando mis cinturones para llegar a ser 10º dan y poseer el rango más alto que se puede conseguir en el judo. Es por todo esto que, cuando aún estaba en Marruecos, un niño y sus padres me preguntaron si merecía la pena apuntarse a judo. Así que, para todos los que os hagáis ésa pregunta: la respuesta es sí. Porque éste deporte de disciplina y constancia te da probablemente lo mejor que puedas conseguir en la vida: la felicidad.